domingo, 24 de mayo de 2015

Que Sera De Ti...




Qué será de tí, 
necesito saber hoy de tu vida. 
alguien que me cuente sobre tus días; 
anocheció, y necesito saber. 

Qué será de tí, 
cambiaste sin saber toda mi vida, 
motivo de una paz que ya se olvida. 
no sé si gusto más de mí, o más de tí. 

Ven, 
que esta sed de amarte me hace bien, 
yo quiero amanecer contigo amor, 
te necesito para estar feliz. 

Ven, 
que el tiempo corre, y nos separa, 
la vida nos está dejando atrás. 
yo necesito saber, que será de tí. 

Qué será de tí, 
cambiaste sin saber toda mi vida... 
motivo de una paz que ya se olvida. 
no sé si gusto más de mí, o más de tí. 

Ven, 
que esta sed de amarte me hace bien, 
yo quiero amanecer contigo amor, 
te necesito para estar feliz. 

Ven, 
que el tiempo corre, y nos separa, 
la vida nos está dejando atrás. 
yo necesito saber... 
...qué será...de tí



miércoles, 13 de mayo de 2015

Miedo a comenzar de nuevo...

Cada mañana, miro el celular esperanzado de que fuese yo el primer pensamiento que tuvieses al despertar.

En mi mente empiezo a idealizar lo que mi corazón desea, pero que mis palabras tienen miedo a expresar…
El miedo de volverme a enamorar lo volvió a sentir mi cuerpo cuando por primera vez cuando tus ojos me dijeron lo que tus labios se negaron a expresar aquella noche, cuando nos mirábamos sin indicio de que fuéramos a tener algo más que una simple amistad.
Miento al decir que contigo no lo quiero intentar;  porque mi corazón se sobre salta cada vez que observo que me hablas hasta con un simple “Hola” por WhatsApp.
Tal vez no sepa lo que pasará hoy, ni mucho menos es lo que pasará mañana, pero si de algo estoy seguro es que tú eres lo primero y último que pienso cada día de la semana.
Tengo la esperanza de que todo lo que mi mente se imagina, sean sólo aquellas pesadillas que yo tanto me hacía, para que cuando mi corazón despertara, quedara lo más intacto de lo que mis pensamientos buscarían destrozar gracias a las ideas locas que mi cabeza estaría por realizar.
Para ser sincero tengo miedo a comenzar de nuevo, porque eso significa jugarme todo por un amor que tal vez sea solo pasajero, pero aun así, después de tanto meditar he decidido dame otra oportunidad.

Los fantasmas de mi pasado, soy consciente de que nunca se irán, pero al saber sobrellevarlos, me servirán para saber en qué no debo volver a fallar y tal vez así, tú puedas ser lo que yo tanto deseaba encontrar.

Y me sigo preguntando: ¿Qué será de ti?



El tiempo ha pasado, los recuerdos ahora cada vez son más borrosos, los buenos momentos a tú lado vienen en imágenes color sepia… Y los sentimientos, esos que alguna vez hacían latir mi corazón con tanta fuerza, esos… Se han esfumado.
Y nada es tan maravilloso como la sensación de desapego, de poder ver las cosas desde el ángulo adecuado y haber dejado atrás el drama y la decepción. Esto no quiere decir que he pasado la página, creo que no es algo fácil, sin embargo, he sabido lidiar con ello.
Aún me descubro preguntándome: ¿Qué será de ti?, ¿cómo ira tú vida?, ¿me recordarás un poco?, ¿estarás en los brazos de alguien más?… En resumen ¿cómo serán tus días sin mí en tu vida?… Y no tengo respuestas, ni una sola. Es tan paradójico que habiendo compartido tanto y sabiendo exactamente cada paso, cada actividad, cada quehacer tuyo a cada momento, de pronto no tenga la menor idea de lo que estés haciendo.
Pese a todo, hay un horizonte al final del camino y llegar a él es un verdadero triunfo. El camino andado luego de un “nosotros”, es sin duda un desafío; éste camino debe ser de aprendizaje, de comprensión y conocimiento de sí mismo.
Ver en retrospectiva nuestra historia es muy sano, visualizarte y pensarte ahora ya no duele. Sin duda es una extraña combinación entre añoranza y resignación. Sientes esa paz interna, que te provoca una leve tristeza  pero que ahora ya no es depresión, ya no provoca lágrimas ni quedarte en cama días enteros… Ahora sólo son recuerdos. Estas desapegándote de una convivencia, de una rutina, de una forma especial de expresar tú cariño por alguien que fue importante.
Olvidar lleva su tiempo, pasar la página es una determinación que llega a su debido momento. No quiero disfrazar mis emociones y sentimientos, así que para serte franca, hay momentos en los que aún me traiciono y quiero saber de ti, pero soy firme en mi postura, no permito manipularme y he evitado a toda costa, todo contacto; tampoco busco excusas para husmear en tus redes sociales. Tuve la madurez suficiente para controlar esos impulsos de indagar sobre ti, en realidad, sé que eso no tiene sentido, quizá encuentre algo de lo que no deseo darme cuenta, porque hay un dicho que reza… “El que busca, encuentra”. Yo prefiero mi paz interior, mi salud emocional y por supuesto, mi dignidad.
Yo opto por no perder mi tiempo en pensamientos masoquistas. Yo deje de ser parte de tú vida, mi capítulo en tu libro se terminó, lo clausuraste, pusiste punto final. ¿Por qué habría de preocuparme por ti ahora?Y no te confundas, no es arrogancia, es simplemente dejar fluir todo, seguir adelante y tomar las riendas de mi vida.
Es imposible hacer que la mente borre de tajo una historia de amor, sin embargo, he trabajado duro para comprender el proceso y tolerar los episodios de pánico, que suelen aparecer en las semanas posteriores a un truene. Fui fuerte, fui un paso a la vez y obtuve resultados.
Es imposible eliminar todo rastro de ti en mi memoria, eso me queda claro, pero es un hecho que ha llegado el momento en el que ya logré archivar en mi memoria nuestro capítulo. Iré a él cuando sea necesario, cuando desee retroalimentarme de aquel “nosotros”, cuando quiera contar alguna anécdota que valga la pena mencionar en el presente, o simplemente, cuando quiera evocarte e internamente me pregunte: ¿Qué será de ti?
Espero de corazón que tú, al igual que yo archives los momentos a mi lado con el mismo cariño que lo he hecho yo. Que haya una razón poderosa que te haga ir hacia esa parte de tus recuerdos, y así sepas y puedas darte cuenta que lo nuestro fue una buena historia; me reconforta pensar que aun que elegiste seguir tú propio camino, valorarás a la persona que fui contigo.
Siempre serás parte de mi historia, los acontecimientos vividos, aquello que dolió, eso no lo puedo cambiar; lo que sí puedo cambiar es el efecto que esos episodios, ahora convertidos en recuerdos, provocan en mi. Siempre me cuestionaré sobre tu destino; más que por amor, será por añoranza.
Imaginaré tú presente en mi mente, te veré feliz, quizá no pueda lograr pensarte con años a cuestas, pero algo en ti, será parecido a mí, algo nos queda de cada pareja, algo nos heredan. Así que iré contigo por siempre y tú estarás en mí a cada paso. Entonces seguiré mi vida con paso firme y feliz, feliz después de todo, después de ti.

Yo pensando: ¿Qué será de ti? … Y tú, tal vez, y sólo tal vez, preguntándote: ¿Qué será de ella?

martes, 12 de mayo de 2015

Cuando Las Miradas...


Cuando las miradas expresan
lo que el corazón quiere decir
las palabras están de más...